El estilo europeo no es un estilo de interiorismo en sí, sino que es más bien un conjunto de varios estilos contemporáneos representativos de la región como el minimalismo y el escandinavo donde la comodidad y la practicidad son el eje central.
Comodidad sobre todo
Tomando la esencia del minimalismo, en el estilo europeo la funcionalidad, la comodidad y la sencillez son la base. Propio de hogares familiares donde las condiciones climáticas obligan a pasar más tiempo en el interior, se busca el orden y la practicidad en el diseño. Si quieres integrarlo a tus espacios evita la sobre decoración con objetos innecesarios y céntrate en el confort y la calidez, para eso nuestro juego Maison para tu espacio es ideal.
Sobriedad y simetría
La luz natural es el mejor aliado en este estilo y los elementos que integremos en la decoración deben aportar positivamente a ello. Líneas suaves, superficies rectas, colores y tonos neutros son indispensables para potenciar al máximo la luz disponible. Utiliza tonos blancos y grises en muebles y complementos. Si quieres integrar una alfombra puedes jugar con texturas y materiales, en tonos claros. Ten ojo con los patrones, si te interesa aplicarlos asegúrate que sean geométricos y de bajo contraste para obtener una sensación de orden y armonía.
Acogedor y contemporáneo
Del estilo nórdico, el europeo toma una de sus características más representativas : Interior sencillo, cálido y confortable. Puedes combinar complementos rústicos y contemporáneos para crear ambientes acogedores. Pisos y aplicaciones en madera coexisten armónicamente con paredes blancas y muebles de líneas rectas. Los textiles son bienvenidos en suave lana y algodón siempre dentro de la paleta de colores.