El rey de la calma, la naturalidad y la calidez. Aporta luminosidad y amplía espacios. El beige es el marco ideal para mucho estilo y el partner perfecto para un sin fin de materiales. En resumen, el beige desborda en virtudes y es el 4x4 de la decoración, en este artículo te lo demostramos.
Un neutro elegante
El beige es un tono versátil que encaja en cualquier espacio en el que se quiera agregar un plus de calidez y armonía. Una de sus cualidades más destacables es la sensación de acogimiento que ofrece, calentando los ambientes con su presencia. En cortinas y cojines es un color que siempre acierta. Sus variados matices, más o menos cálidos, hacen que combine perfectamente con muchas tonalidades.
Úsalo como quieras
El beige en las paredes será un éxito, sin lugar a dudas, pero también si lo usas en la tapicería de tus muebles. Incluso si pruebas ambos juntos será una combinación que no fallará. La clave está en los matices y como resultado obtendrás un espacio luminoso y cálido por partes iguales.
Todoterreno
Funciona en todos los espacios de la casa, con o sin luz, grandes y pequeños, interiores y exteriores. Y se adapta a mil tonos de materiales y madera. Pero si quieres sacarle el máximo provecho a su calidez acompáñalo de tonos tierra y naturaleza. En cualquier estilo, úsalo para compensar, para calentar, espacios que podrían quedar muy fríos o para suavizar contrastes muy duros. El beige es un tono “al natural” por definición, por eso es un básico en decoración.